Hoy hace un año que nuestro mayor pilar nos dejó... nos dejó porque su cuerpo estaba demasiado cansado, porque el cansancio de la constante lucha la dejó exhausta... ningún día es peor o mejor que otro sin ella, su huella es demasiado profunda para que así sea... pero hoy quiero homenajearla, quiero recordar la gran persona que fue, quiero recordar como tantas personas acudían a ella en busca de consejo y consuelo y como siempre, sin excepción, nos deleitaba con las más tiernas y acertadas palabras...
Quiero recordar cómo me acariciaba el pelo, el sabor de los platos que cocinaba, su meticulosidad a la hora de arreglar cualquier cosa... su atenta complicidad... su pícara y siempre bondadosa sonrisa...
Nunca tuvo nada suyo, y nosotros siempre tuvimos lo mejor de ella.
Sólo tú en mi oscuridad, y en la luz de todos mis días.
